17 abril, 2020

Hoy quedó listo en Turín el nuevo hospital para la atención a los enfermos de la COVID-19, en el que laborará a partir de mañana la brigada cubana junto a médicos y enfermeros italianos. Es un antiguo taller para la reparación de locomotoras, readaptado primero como centro cultural ―en una pared todavía pueden leerse los datos de curaduría de la última exposición, abruptamente interrumpida por la pandemia―, (img.1) al modo de nuestra Fábrica de Arte, y ahora reacondicionado en uno de sus gigantescos pabellones de ladrillos ennegrecidos como hospital. Ha sido una readaptación en tiempo récord, con el apoyo del Cuerpo de Ingenieros de la Fuerza Aérea italiana.

Durante esta semana, los médicos y enfermeros cubanos se entrenaron en el uso del traje con el que trabajarán y estudiaron y discutieron los protocolos italianos de atención a los pacientes, así como el diseño epidemiológico del lugar. Hoy participaron, desde horas tempranas, en un trabajo voluntario para ubicar los muebles y los sofisticados equipos médicos en sus cubículos. (img. 2) Cada día, al llegar, se les mide la temperatura corporal. El salón, que solo recibirá a enfermos ya confirmados con COVID-19, tiene un total de 92 camas, entre la sala general, la de terapia intermedia y la intensiva. (img. 3) (img.4)

El Gobernador visitó la instalación hoy en la tarde en una visita privada, sin prensa, para saludar y felicitar a quienes la hicieron posible y la sostendrán. Mañana tendrá lugar la conferencia de prensa y el domingo está prevista la llegada de los primeros enfermos.

Hoy, cuando la brigada cubana llegó al comedor, la muchacha detrás del mostrador añadió un plato que no estaba en exhibición: una lasaña casera, muy sabrosa por cierto. Al final, nos entregó un sobre sellado. Cuando lo abrimos, encontramos esta carta: «A todos los profesionales de la salud cubanos: Un pequeño pensamiento culinario que espero les complazca y les haga apreciar nuestra desesperada Italia. Estas son las famosas lasañas italianas. Les agradezco desde el fondo de mi corazón por venir a nuestro rescate. ¡Gracias!. Emma Bonatto, enfermera del Hospital Amadeo di Savoia.» Ella había acompañado la víspera a los enfermeros cubanos durante la visita a su hospital.

Antiguo taller para reparación de locomotoras rehabilitado para extender el servicio médico durante la pandemia de Covid-19.

Personal cubano e italiano durante su trabajo voluntario para acondicionar el local de nuevo uso médico.

Últimas etapas de la rehabilitación del local para ampliar atención a pacientes con Covid-19 en Turín.

Revisión del diseño epidemiológico del local renovado.

Enrique Ubieta