Un espacio pequeño es el encuentro obligatorio con uno mismo. ¿Quién no ha pasado por el pensar, repensar, y volver a la misma idea de nuevo? ¿Quién no está padeciendo ya los efectos de estar dentro de la casa por muchos días sin reciclar la rutina diaria y el aire fresco? En estos momentos apostar por la seguridad se ha convertido en todo un reto para nuestros recursos emocionales, y para todos los demás recursos. Pero los pequeños momentos con quienes nos importan y no los pequeños espacios siguen siendo, definitivamente, lo más importante.

Cuando el espacio se hace pequeño, a la voluntad le toca dar un estirón. ¡Y ha crecido! Así que, si puedes hacer algo, ¡hazlo! Creemos en eso y en el impacto real que tiene una idea.

Esa es la razón por la que agradecemos hoy a la comunidad de diseñadores cubanos. Gracias por acompañarnos en esta lucha de Cuba por la vida, por pensar y repensar en los otros, en los nuestros, los que están en la primera línea enfrentando la pandemia. Gracias por donar tu tiempo y tus recursos, por publicar tu frase y dar tu cartel, gracias por cada gesto de apoyo.

En estos momentos tan adversos, millones de luchadores están unidos por la vida y el diseño ha apoyado la lucha diaria de muchos de ellos. Has ofrecido lo que tenemos, pensamiento de diseño, porque una idea también salva.

Sentimos orgullo, y ese orgullo es parte del secreto para sanar y reconstruir la Cuba que amamos.

#HazQueSeVea #UnDiseñoQueSalve #EnUnaCubaQueSana