21 septiembre, 2020

Fundación Caguayo: 25 años de aportes al diseño cubano

Addiley Palancar Guerra

Fundar y fundir, moldear y modelar, conceptualizar y proyectar, ejecutar y producir, son cadenas de acciones que responden a ciclos continuos. Dicho así podría pensarse en procesos monótonos y carentes de creatividad. Nada más alejado de la realidad cuando se trata del binomio arte y diseño cubanos, emplazados en los predios de la Fundación Caguayo para las Artes Monumentales y Aplicadas, que este lunes 21 de septiembre arriba a su 25 cumpleaños.

Un aniversario cerrado en tiempos de pandemia, que si bien se encuentra limitado en festividades, presenta un simbólico paralelismo al coincidir con un momento histórico de crisis, tal y como sucedió durante su fundación en el año 1995 cuando Cuba afrontaba el Período Especial. En ese entonces, como ahora, las producciones nacionales se revelaban como única alternativa de supervivencia ante los daños económicos padecidos por el país.

La añorada nomenclatura diseño cubano tiene en la institución cultural Caguayo a uno de sus principales aliados, el que, a pesar de su juventud, deviene referente imprescindible.

El DI. Luis Ramírez Jiménez, actual vicepresidente de la Fundación Caguayo para las Artes Monumentales y Aplicadas. Foto: Camila Valdés Peña.

El DI. Luis Ramírez Jiménez, actual vicepresidente de la Fundación Caguayo para las Artes Monumentales y Aplicadas. Foto: Camila Valdés Peña.

Entre los hombres y los nombres que luchan por la legitimación del diseño nacional se encuentran su fundador, el artista Alberto Lescay, y el DI. Luis Ramírez, su actual vicepresidente, quien compartió declaraciones exclusivas con la Oficina Nacional de Diseño (ONDi).

En palabras del profesional, durante este cuarto de siglo el concepto de trabajo de “la Fundación Caguayo tiene como principios básicos la ética, la sinceridad y el altruismo en cada uno de sus actos. Somos una institución no gubernamental de carácter público y nuestra esencia es completamente humana, como la del diseño que buscamos posicionar”.

Expo El eterno retorno. 1ra Bienal de Diseño de La Habana. Galería Factoría Habana.

Curaduría Concha Fontenla. Fotos: Cortesía del entrevistado.

Por supuesto, se trata de un camino repleto de desafíos, entre los que Ramírez advierte: “Proteger nuestros valores, compartir conocimientos, acompañar, apoyar y promover proyectos, crear alianzas de desarrollo, así como responder a la demanda cultural de nuestra nación en todas sus vertientes, son nuestras prioridades”.

A juzgar por el onomástico 25, se advierte la lozanía de Caguayo. Sin embargo, como el paso de los años es la sumatoria de experiencias, las prácticas de la entidad la perfilan como uno de los referentes más importantes para el diseño cubano y las artes aplicadas. Cuando indagamos con su vicepresidente y diseñador industrial Luis Ramírez sobre la relación entre la juventud institucional y la alta reputación alcanzada, respondió: “La Fundación Caguayo para las Artes Monumentales y Aplicadas es joven como lo son el Instituto Superior de Diseño (ISDi) y la ONDi, pero el diseño en Cuba ya se aplicaba desde mucho antes, y este legado creó las bases para el entendimiento de tan necesaria profesión.

Expo Convergencias. Factoría Habana.

Curaduría Concha Fontenla. Fotos: Cortesía del entrevistado.

Nosotros somos continuadores legítimos de esa tradición y estamos conscientes de su aplicación en muchos de los campos que desarrollamos, en los cuales resulta prioridad el bienestar social de la mayoría. Nuestra constancia en aplicar lo aprendido en las producciones, hacerlo visible y compartir procedimientos con todos ha servido para demostrar la valía de nuestra gestión”.

Sobre el impacto del trabajo de la Fundación en el diseño cubano todo, el creador explicó: “Los impactos pueden ser transitorios y ese no es nuestro modo de operar. Preferimos demostrar con acciones concretas y resultados, convencidos de que lo que hacemos aporta utilidad, bienestar, cultura y espiritualidad.

Respondemos a necesidades reales y ponemos todo nuestro empeño en llevarlas a término con soluciones en las que el diseño siempre sea parte importante. Paralelamente convocamos y facilitamos alianzas con otras instituciones, con los diseñadores activos y con estudiantes para experimentar y mostrar sus proyectos en exposiciones y eventos de carácter nacional e internacional. Esas son prioridades en nuestro contexto”.

Expo Más allá de la Forma. 2da Bienal de Diseño de La Habana. Fundación Ludwig de Cuba.

Curaduría Concha Fontenla. Fotos: Cortesía del entrevistado.

Prioridades que también han labrado la ruta de estos años y certifican los aportes de Caguayo al diseño cubano. Según el especialista: “La Fundación Caguayo para las Artes Monumentales y Aplicadas desde su surgimiento ha contado con el diseño como complemento indispensable en el proceso de conceptualización y realización de todos sus proyectos institucionales. Su expansión y efecto social se expresan y materializan en servicios y productos gráficos e industriales útiles, algunos producidos por talleres propios y otros por creadores independientes representados por la empresa comercializadora Caguayo S.A. El resultado de este trabajo llega a espacios públicos o privados pasando a formar parte de nuestra cotidianidad.

Expo Fuego Fatuo. 2da Bienal de Diseño de La Habana. Museo Nacional de la Cerámica Contemporánea de Cuba.

Curaduría Surisday Reyes. Fotos: Cortesía del entrevistado.

Junto a la ONDi y el ISDi, ambas instituciones profesionales del diseño cubano con las cuales mantenemos permanente vínculo de trabajo, hemos participado en los congresos y bienales de Diseño donde la teoría y la práctica se materializan en intercambios, talleres, conferencias y exposiciones que demuestran las capacidades de nuestros diseñadores y las potencialidades del diseño cubano.

I Concurso de cerámica utilitaria ´Ideas en Formas¨. Museo Nacional de la Cerámica Contemporánea de Cuba. Curaduría Surisday Reyes. Foto: Cortesía del entrevistado.

Taller de producción de cerámica de la Fundación Caguayo. Foto: Cortesía del entrevistado.

Recientemente hemos convocado el I Concurso Nacional de Cerámica Utilitaria: Ideas en Formas, junto al Museo Nacional de Cerámica Contemporánea Cubana. El premio principal será la puesta en producción de manera seriada del producto ganador, y su posterior comercialización. De esta manera cerramos el ciclo, propiciando que el producto llegue a todos y pueda ser usado en las casas de manera habitual. No hay mejor aporte que contribuir a esa perspectiva de realización concreta, tangible y pública del diseño”.

Apegados a sus logros y empeños continuos, Ramírez vislumbra el camino hacia las siguientes conmemoraciones con los sueños a cuestas, pues: “disfrutamos del placer de hacer bien a muchos y de que el arte y el diseño cubano formen parte de nuestras vidas. Así que seguiremos creando, apoyando y aportando a ese bienestar común”.