Un homenaje póstumo a la reconocida vitralista cubana Rosa María de la Terga marcó ayer la jornada inaugural de la XXI Feria Internacional de Artesanía Fiart 2017, cita que se extenderá hasta el 17 de diciembre.
Con más de cuatro décadas de una ininterrumpida carrera consagrada al cultivo y rescate del vitral, quisimos rendir tributo a De la Terga, una de sus más virtuosas cultoras, dijo en las palabras de apertura Arturo Valdés, presidente del Fondo Cubano de Bienes Culturales.
De su encomiable labor, resaltó, son testigos innumerables obras a lo largo de toda la Isla, creaciones en las que el empleo del color y de elementos de la flora y fauna tropicales funcionan como un sello indiscutible. Por estas razones la vidriería cubana contemporánea debe su revitalización y futuros resultados a la maestra Rosa María, de la cual se encuentra, gracias a sus familiares, una importante muestra en Fiart.
Bajo la premisa Arte, utilidad y oficio, la Feria está dedicada a la manifestación del vitral, a la provincia de Santiago de Cuba, y al Comandante en Jefe Fidel Castro, al cumplirse el primer aniversario de su partida física, apuntó Valdés.
El recinto ferial Pabexpo, en el oeste de la capital, acoge el evento, que se inserta en las celebraciones del Año Iberoamericano de las Artesanías. La jornada fue escenario, además, para entregar el Reconocimiento por la obra de la vida a los creadores Jorge Luis Gil, Gregorio Jorge y Maura del Carmen Pineda. En la inauguración estuvieron presentes Abel Prieto, ministro de Cultura y Miguel Barnet, presidente de la Uneac, entre otras personalidades de la cultura.
Durante 12 días artesanos procedentes de Argentina, Colombia, Chile, España, China, Guatemala, India, México, Brasil, Uruguay y Cuba, entre otras naciones, mostrarán al público lo más representativo de sus creaciones artesanales.
Tomado de Granma