19 septiembre, 2017

Innovar y diseñar para transformar el mundo

Hoy se está innovando pero no de la manera adecuada. Innovación es la creación de un nuevo valor humano y en consecuencia un valor comercial

Su visión de innovación es mucho más compleja y acertada que cualquier definición de la palabra como tal. Innovar, es parte de la vida diaria de este joven talentoso que supo entender que entre el diseño y las ganas de cambiar el mundo, es posible hacer sinergia, y lograr como resultado un concepto integral donde diseñar, tenga que ver con un cambio que vaya enfocado a ver, saber y aplicar un mejor ambiente con capital humano en condiciones favorables.

La trayectoria de Andrés Valencia, tiene que ver con la inquietud, las ganas de hacer las cosas pensando siempre en el futuro y tomando decisiones con respecto a la actualidad. Tres cuartas partes de su vida profesional, las vivió en Alemania, donde su concepción del diseño tuvo un ángulo distinto del que comúnmente se enseña en las aulas de México.

“Llegué de Alemania me metí a un programa de incubación, en el primer concurso de industria creativa, y metí lo que vino siendo como mi tesis, y ése fue mi primer modelo de negocio. Abrí una pequeña agencia de comunicación y duramos 4 años, donde me di cuenta que no iba hacia donde quería, no terminaba por apasionarme tanto y cuando me di cuenta que podíamos revolucionar muchas cosas, pensé que había que empezar de cero”, narra Andrés haciendo una retrospectiva de su inicio profesional.

Previo a emprender con la firma que lo ha llevado hasta el reconocimiento, Andrés creó un modelo de negocio planteando, dice, cuáles son las problemáticas, una posible propuesta de valor y por un mes estuvo valorando el modelo con un par de empresas. “Hubo buenos resultados, y un año después fue como se fundó la firma, en 2014”.

La empresa que Andrés dirige lleva por nombre Change Innovation, y su objetivo es ayudar a que las empresas tengan futuros ideales a través de la prospectiva, el diseño y la innovación.

Un innovador concepto de diseño

La concepción de diseño de Andrés va mucho más lejos que cualquier concepto antes definido. Para el creativo tapatío, afirma: “un ejercicio que además de ser divertido es de mucha utilidad, es olvidarse del diseño como lo conocemos, necesitamos un departamento de empatía o un departamento de sensibilidad, de vinculación con personas internas y externas, entonces al final del día el cómo lo entiendas es lo de menos, pero eso es diseño”.

Diseño, afirma Andrés, no se trata de un departamento de 20 personas con computadoras de última generación y 40 creativos o artistas talentosos. Es, en contraste, un departamento con procesos mentales, intelectuales y holísticos, con la capacidad de resolver problemáticas. “Esas problemáticas pueden ir encaminadas en problemas de comunicación, comportamiento, hábitos de consumo, etc.”.

La definición como tal de este concepto de diseño estratégico, es parte fundamental para que una empresa no muera, y aunque desde 1968 que empezó formalmente la escuela de diseño es el mensaje que se ha venido dando, hoy es más notorio y alarmante por el número de empresas que muren. “Las empresas a menudo tiene un concepto equivocado de su departamento de diseño, y hay cierta resistencia a esto porque piensan que como ya tiene quien haga redes sociales, quien haga etiquetas y demás, ya con eso tienen un departamento de diseño integral, y no lo es”.

Innovar o morir, ésa es la clave, y parte fundamental del concepto de modelo de diseño que Andrés ha implementado con éxito en diversos casos empresariales, haciendo transformar y revivir, o incluso salvar a firmas mediante el diseño y la innovación.

Hoy se está innovando pero no de la manera adecuada. Innovación es la creación de un nuevo valor humano y en consecuencia un valor comercial. Hay que pensar primero en las personas y después en cómo monetizar y no al revés.

Para sentirse orgulloso

Andrés Valencia es de esos hijos privilegiados de la tierra cuyos logros obtenidos son la muestra tangible del porqué de su carrera.

Además de tener una firma exitosa que ha traspasado fronteras con sus métodos consultivos, es actual presidente de Consejo Promotor de Innovación y Diseño del estado de Jalisco, cargo ganado a pulso por el éxito en trayectoria profesional. Es también ex presidente del Colegio de Diseñadores Gráficos de Jalisco, y cuanta con un MBI en Business Innovation.

Dentro de su actual empresa, resume Andrés, hubo un proyecto originado en Cuba, donde desde hace dos años colaboran para el Consejo de Industrias. “Cuba es un país lleno de limitantes y necesidades, y ellos están preocupados por generar nuevos modelos.  Hemos estado durante dos años hablando con la gente, comiendo en sus casas, durmiendo en sus camas, revisando desde  su basura hasta cómo guardan su comida. Creamos varios conceptos, y uno de los que más gustó, desarrollado con tecnología cubana que se llama El Cubo de los Sueño, cómo dormido puedes estar generando ingresos, y la tecnología existe para leer tus sueños y grabarlos. Lo que hicimos fue un modelo de negocio donde las marcas pueden entrar a tus sueños y tu soñando ves marcas y pueden vender tus sueños para que marcas puedan ver cuáles son realmente tus peores sueños o pesadillas y entonces al final puedes monetizar tus sueños”.

Guadalajara, lejos de ser Capital de la Innovación

Para Andrés, el hecho de que hoy en día se viva con esos entornos de que nuestra ciudad es innovadora y que es capital dela innovación, es un tema que está lejos de ser cierto y no cambia, afirma, ninguna realidad. “El hecho de que haya empresas que generan la mejor tecnología en un laboratorio, pues eso no tiene nada que ver con el ciudadano de a pie; necesitamos una ciudad creativa desde que tú vas a cruzar la calle y lo haces de forma tranquila y segura, eso es una ciudad creativa y realmente innovadora. Si hablamos de una capital de la innovación, tendríamos, de entrada, que ser mejores que Singapur o que Londres”.

A decir de Andrés, la problemática radica en que el futuro lo estamos impulsando a través de la tecnología, y afirma: “creo que no hay nada más equivocado, el futuro va a seguir siendo humano, y debemos entender que la tecnología es sólo un canal para nosotros”.

Asimismo, un impedimento grande para que ese concepto de capital de innovación sea una realidad, es que se están tomando decisiones desde atrás de un escritorio, basado en datos y gráficas de Excel. “Los datos son pasado y la gente que vive en el pasado no puede pensar en el futuro. No hay una verdadera empatía con las necesidades reales”.
Cámara de Comercio de Guadalajara, asevera Valencia, es un eje central para aportar a que Guadalajara pueda ser capital de innovación, pues como cúmulo del gremio empresarial es un incentivador a que las empresas se sumen a ello. “Hay que tomar decisiones con base en la gente que está en la calle, quien vive a dos horas de su trabajo, quien está en silla de ruedas, quien a veces no tiene auto, con esa gente es con quien hay que sentarse, y no con el empresario súper exitoso que tiene 500 empresas, eso ya no”.

Tomado de JUNTOS Gaceta MercantilAndrés Valencia